Incontinencia Urinaria
¿Qué es la Incontinencia Urinaria?
La incontinencia urinaria se describe como la pérdida involuntaria de orina, puede presentarse en ambos sexos y afectar a cualquier edad, es decir, a niños, adultos y ancianos.
Esta problemática es motivo de vergüenza para quien la padece, ya que en cualquier momento podría sufrir de pérdidas considerables de orina que afectan su vida social, sexual y calidad de vida.
¿Cuáles son las Causas de la Incontinencia Urinaria?
La incontinencia urinaria tiene múltiples causas. En pacientes del sexo femenino, la incontinencia puede tener una causa anatómica o bien una causa de tipo funcional. En las mujeres la continencia urinaria está dada por el soporte que brindan todas las estructuras pélvicas a la uretra. La vagina, el recto, la vejiga y los músculos pélvicos están en un equilibrio que evitan las fugas de orina. Cuando existe alguna alteración anatómica en alguna de estas estructuras el equilibrio se pierde y la uretra no es capaz de evitar la salida de orina. En estos casos puede existir fuga con la tos, estornudos, risa, esfuerzos, caminar, subir o bajar escaleras, etc.
En los hombres la incontinencia urinaria es más rara, sin embargo, puede aparecer en cualquier edad. Aquellos pacientes que han sido sometidos a algún tipo de cirugía prostática o uretral pueden llegar a presentar incontinencia urinaria temporal o permanente. En estos casos, la salida de orina puede ser moderada o tan abundante que sea necesario el uso de un protector.
Cuando la incontinencia es secundaria a causas funcionales, la responsable principal es la vejiga. Es sucede cuando existen contracciones del músculo vesical llamado detrusor intensas. Estas contracciones son involuntarias y generan deseos importantes de orinar aunque no exista una cantidad importante de orina en la vejiga. En ocasiones esta urgencia urinaria puede desencadenar la salida de orina a través de la uretra.
Otras causas de incontinencia urinaria pueden ser las infecciones de vías urinarias, el crecimiento prostático, la retención urinaria aguda, las estrecheces uretrales, las piedras ureterales o vesicales y la vejiga hiperactiva.
¿Cuáles son los Síntomas de la Incontinencia Urinaria?
- La incontinencia urinaria se manifiesta a través de diversos síntomas, entre los más comunes se
- mencionan los siguientes:
- Incapacidad de retener la orina en la vejiga.
- Necesidad urgente e incontrolable de orinar.
- Distensión abdominal.
- Molestia y dolor al orinar (disuria).
- Debilidad progresiva para mantener la orina almacenada en la vejiga, trayendo consigo la
- sensación de no haberla vaciado por completo.
- Necesidad de orinar durante las horas nocturnas (conocida como nicturia).
- Pérdida accidental de la orina durante las horas de sueño (enuresis nocturna).
- Pérdida excesiva de orina durante las horas del día (enuresis diurna).
- Molestias pélvicas.
- Pérdidas de orina al toser, estornudar, hacer ejercicio, estar de pie o en cualquier otra actividad
- física.
¿Cómo se diagnostica la Incontinencia Urinaria?
Aunque resulte incómodo tratar este problema, es necesario buscar la ayuda de profesionales que puedan dar solución a esta enfermedad, sobre todo si va en incremento o comienza a afectar el desenvolvimiento de las actividades cotidianas.
La incontinencia urinaria puede ser diagnosticada por un médico urólogo, ginecólogo o médico general. Lo primero que el doctor debe realizar es un historial médico y un examen físico al paciente, con el fin de conocer datos relevantes y definitivos para el posible tratamiento. Seguidamente, para complementar el diagnóstico, se deberán realizar una serie de exámenes que permitirán determinar la causa de la incontinencia. En ocasiones se le pide al paciente que evalúe diariamente su producción de orina, además de la frecuencia de los episodios de incontinencia urinaria. Esto se conoce como Diario Miccional.
Tratamientos
Al concretar el diagnóstico de la incontinencia urinaria, se inicia el tratamiento para controlar los episodios de incontinencia que se presentan de manera espontánea. De acuerdo al tipo de incontinencia se deberá dar un tratamiento en específico. A continuación, se hará mención de cada uno de estos:
Incontinencia de esfuerzo
Este tipo de patología puede ser contralada con:
- Cirugía.
- Fisioterapia del suelo pélvico.
- Dispositivos de incontinencia.
- Medicación.
Incontinencia de Urgencia
La incontinencia de urgencia se puede controlar con la ayuda de los siguientes tratamientos:
- Cambios en la dieta del paciente.
- Modificación del comportamiento.
- Ejercicios en la zona pélvica.
- Uso de medicamentos.
- Intervención quirúrgica.
Incontinencia Funcional
Para controlar la incontinencia funcional se realizan diversos tratamientos que ayuden al paciente encontrar las verdaderas causas que provocan el accidente. Entre estos tratamientos se puede mencionar la realización de ejercicios, utilización de compresas.
Incontinencia por Rebosamiento
En el caso de diagnosticarse una incontinencia por rebosamiento, es pertinente realizar una derivación urinaria o cateterismo.
Incontinencia Mixta
La incontinencia mixta puede ser sobrellevada con el uso de fármacos, además de la realización de procedimientos quirúrgicos específicos como el cabestrillo o suspensión.
Tratamientos No Quirúrgicos
Entre los tratamientos no invasivos se puede mencionar:
- Medicamentos como estrógeno tópico y duloxetina.
- Dispositivos médicos.
- Estimulación eléctrica.
- Estimulación magnética.
- Ejercicios de Kegel.
Es importante mencionar que todos estos procedimientos médicos deben ser indicados por el especialista.
Como primera opción suelen recomendarse tratamientos no invasivos. La realización de ejercicios o toma de medicamentos puede ayudar a controlar la incontinencia. Sin embargo, estos tratamientos son menos efectivos en comparación con las intervenciones quirúrgicas.
Cirugías
Entre los tratamientos no invasivos se puede mencionar:
- Esfínter urinario artificial.
- Cabestrillo artificial.
- Reparación urinaria.
- Inyecciones de colágeno.
Riesgos
Los riesgos de la incontinencia urinaria son los siguientes:
- Problemas severos en la piel.
- Infecciones en la piel.
- Aparición de úlceras causadas por la humedad en la piel.
- Infecciones en el tracto urinario, genitales o región perineal.
- Impactos negativos en la vida personal y en las relaciones interpersonales del paciente.