Próstata
¿Qué es la Próstata?
La próstata es una glándula que se encuentra localizada en la región pélvica. Esta glándula se encuentra ubicada entre la vejiga urinaria y la uretra. La uretra, que es el conducto por donde la orina drena al exterior, está rodeada por la próstata. Al ser una glándula, la próstata, cumple con la función de secretar sustancias necesarias para propiciar un ambiente adecuado a los espermatozoides para el momento de la fecundación.
De igual manera tiene función antibiótica y función hormonal al convertir la testosterona en dihidrotestosterona. El líquido prostático o seminal es formado por la próstata y contiene sustancias como zinc, poliaminas, ácido ascórbico, colesterol y glucoproteínas como el antígeno prostático específico. La próstata responde al estímulo hormonal de la testosterona. Esto quiere decir que mientras exista testosterona circulante en el organismo, la próstata continúa creciendo.
¿Porqué crece la Próstata?
En los adultos jóvenes, la próstata tiene un peso normal de 20 grs. A partir de los 40 años, la próstata comienza a aumentar de tamaño. El crecimiento será variable en cada individuo. En algunos hombres el crecimiento puede ser moderado o leve y aun así causar síntomas, mientras que en otros el crecimiento puede ser exagerado. Los síntomas urinarios o sexuales no necesariamente están relacionados con el tamaño de la próstata.
Un crecimiento leve puede generar muchos síntomas. El crecimiento puede generar complicaciones mayores como sangrado urinario, alteración en la función renal, formación de piedras en la vejiga y alteración en la calidad de vida, afectando el trabajo, la función sexual y la vida social.
Síntomas de la Hiperplasia Prostática
Los síntomas pueden ser variables y presentarse intermitentemente.
- Dificultad o tardanza para empezar a orinar
- Chorro con menor fuerza o adelgazado
- Interrupción del chorro mientras orina
- Sensación de no vaciar completamente la vejiga
- Goteo de orina al terminar de orinar o continuo.
- Orinar con frecuencia
- Orinar durante la noche más de una ocasión.
- Sentir urgencia o fuga de orina
- Ardor al orinar
- Sangre en la orina
- Infecciones urinarias
- Dolor testicular
- El crecimiento prostático puede afectar la erección y con ello la vida sexual.
Diferencia entre Hiperplasia Prostática y Cáncer de Próstata
Es importante recordar que el crecimiento prostático no es lo mismo que cáncer de próstata. Para esto es muy importante realizar su chequeo anual. Puede existir cáncer en una próstata muy crecida, sin embargo, el cáncer de próstata puede presentarse sin importar el tamaño. El urólogo será quien determine si los síntomas que se presentan y las características de la próstata son debido a crecimiento benigno o si existe alguna sospecha de cáncer.
¿Qué debo hacer si me diagnostican Hiperplasia Prostática?
En caso de tener alguno de estos síntomas es recomendable buscar atención especializada con un urólogo a la brevedad para evitar complicaciones mayores a mediano y largo plazo.
De no atender el crecimiento prostático pueden llegarse a presentar complicaciones importantes. Entre ellas, incapacidad para orinar, dolor al orinar, infecciones urinarias repetidas, sangrado al orinar, insuficiencia renal, disfunción eréctil y dolor o infección testicular.
Tratamiento de la Hiperplasia Prostática
Actualmente el tratamiento de la Hiperplasia Prostática (crecimiento prostático) depende en gran medida del tamaño de la próstata y la gravedad de los síntomas. El tratamiento inicial es a base de medicamentos.
Con los medicamentos actuales puede lograrse una mejoría muy importante de los síntomas cuando el crecimiento es moderado.
Cuando los medicamentos no son suficientes o el crecimiento es mayor, el tratamiento quirúrgico mínimamente invasivo es el que se realiza con mayor frecuencia en todo el mundo. Esta cirugía se conoce como resección transuretral de próstata.
Consiste en la extirpación de la parte interna de la próstata que ocasiona la obstrucción y con ello los síntomas. Es una cirugía que se realiza de forma endoscópica (sin heridas) y sus resultados se acercan al 95% de éxito.
Existen nuevas técnicas como el uso del láser verde o Green Light, en donde se realiza una vaporización del tejido prostático con el uso de rayo láser. Otra técnica es la enucleación prostática con rayo láser, en donde la próstata es extirpada en una sola pieza mediante el uso de rayo láser de holmio.
En aquellos pacientes que tienen algún problema de salud que impide la cirugía o de alto riesgo, existe la posibilidad el aplicar el UROLIFT. Esta técnica consiste en la colocación de dos a cuatro “tirantes” que abren nuevamente el conducto uretral obstruído por la próstata. Es un procedimiento ambulatorio con excelentes resultados.
En aquellas próstatas de gran tamaño, es posible realizar una cirugía abierta para extirpar la parte interna de la próstata por completo, eliminando el tejido completamente. La elección de la cirugía dependerá en gran medida del tamaño prostático, así como de las condiciones generales del paciente.
Es muy importante que su médico le informe sobre los beneficios de cada procedimiento, así como de los detalles previos y posteriores a cada cirugía. Todos estos tratamientos ofrecen resultados muy exitosos, mejorando la calidad de vida de los pacientes y sus familias considerablemente.